Segundo discurso de Cayo Lara

El paro no sube, ni baja, ni nada ¿Qué sabrán ustedes de lo que sube y baja en este país? Eso lo decidimos nosotros. Aunque no podamos, ni queramos, luchamos... ¡y no sólo lo dice la CNT! Aquí luchamos, unos pocos, siempre hombres con valentía y honor. Aquí no hay gallinas, ni nenazas, ni mariconas. Luchamos como siempre, desde nuestro lugar. A pesar de tanto luchar, no todo sale bien... Simplifico: "Mi hija ha emigrado" (sic) Podemos emigrar. Acabaremos todos podiendo, ya se vera... Esto es el fin. Tantos años al servicio de la Corona y ahora nos vienen con estas. No hay justicia. El futuro heredero del PSOE éramos nosotros. Y mira como nos lo pagan... Con otro partido inventado al final de régimen. Esto es como una broma tonta en la que siempre caemos los mismos. ¡Otra vez nos la han vuelto a meter doblada, joder! Pues que ustedes sepan que nunca nos rendiremos, ¡ni podemos ni hostias! ¡joder! ¡A tomar por culo todos! Pero de aquí, ¡no se mueve ni dios!

Liberacion, amor, exilio y escritura

Habrá personas que escriben para leerse, siempre.

Aunque otras escribimos para verte a tí.

Tantos años y años de ausencias,

no me permiten imaginar mas que palabras

que traigan la licencia para evocar tu recuerdo.

Para que mi corazón no se seque en estas tierras de exilio y de exiliadas.

Pues ni el dolor desaparece con pasatiempos de pasiones varias,

pobre idiota,

cuando el amor se viste

o en poemas equivocados

o en letras malsonantes.

Quizás alguien pueda escribir para leerse siempre.

O, al menos de otra forma que no sea por amor

ni por carisma que camufle semejantes engaños.

Yo, a estas alturas de camino y de exiliada,

a tal revelación no empeño.

¡Que cada palabra y cada llanto,

recoja el amor y el recuerdo,

y que en mi sueño se estampe!

El héroe y el villano

A las diez de la mañana, el villano ya llevaba dos horas encerrado en su despacho tratando de atrapar al héroe.

A esas horas, y gracias a su astucia, el héroe ya había conseguido llegar a la escuela sin que le atrapara ningún control policial y lo deportase por no tener papeles de villano. Otro día más, ganado.

Y otro día más vencido... aunque, ¿quién es el vencido aquí?