domingo, 15 de agosto de 2010

Con ken loach

http://www.goear.com/listen/acf7262/la-gran-porta-de-kiev-mussorgsky

Llevábamos mucho tiempo escondidos los dos.
Tanto que olvidamos cómo era la luz,
y al salir del fondo de nosotros,
ni siquiera sabíamos que se podía levantar la cabeza.

Pasamos media vida allí abajo,
tanto, que la osadía desapareció por completo.
Por eso, ver el mar y la luz nos producía un inmenso dolor, de angustia,
porque estabamos tan acostubrados a soportarlo todo
que llorabamos sin aire y sin agua.

Pero ahora que estamos sólos,
ahora que ya no agachamos la cabeza al mismo tiempo,
podríamos volver a intentarlo,
pero esta vez tendremos que mirarnos a la cara
y decirnos todo lo que callamos,
lo que nos impedía respirar al estar juntos.

También habrá que acabar con la comodidad
de llevar esa vida programada.
Acribillar a balazos a ese maldito cuento de hadas
que estos desgraciados repiten para imponer su tiranía de lo estúpido.
Y en eso estamos, diciendonos las cosas a la cara ...